martes, 23 de julio de 2013

Seda salvaje


De verano envuelto
entre telas de alfombra
áspero y tierno,
y en penumbra.
De un día de junio
del septiembre en la costa
y de mil aguijones de fresa
o de paños de alforja.
Demasiado volátil
entre dedos de anciano
siempre exótico, siempre nuevo
siempre el mismo.
En un momento de otro día
o quizá de una noche
de este lejano trance.
Del olor de los huecos,
del sabor del viento
que transita
cuando todo es posible.
Del calor de unas manos
y de la acechanza
a ese pájaro
que se rebeló en vuelo
en otro tiempo
de otro verano.